| 10 diciembre, 2020

Abstract
Los conocimientos adquiridos  en el aula virtual, le dan forma al pensamiento crítico de los alumnos. En este ensayo se nos presentan tres conceptos: motivación, estrés y la inclusión laboral. En el tejido social de las organizaciones afectan la salud emocional de los colaboradores. Desde la experiencia del alumno que labora nos comparte una argumentación ante tales situaciones dándole forma a los conceptos mencionados y compartiendo cuando ha habido capacidad de agencia, haciendo posibles soluciones que permitan al colaborador una mejor calidad de vida laboral.

Rodriguez, López, C.; Reynoso, Núñez C. Por qué no me dan ganas de ir a trabajar. (2020) Tlaquepaque. ITESO

Autor: Cristóbal Rodríguez López

Este ensayo habla de la experiencia laboral y escolar que he tenido en los últimos años, la cual me ha ayudado a analizar y profundizar en el tema.
Para el clima organizacional, hay diversos factores que determinan si existirá un ambiente sano o no dentro de la organización, algunos de estos factores son: La motivación laboral, la inclusión de la diversidad y el estrés laboral, sobre estos temas ahondaré a lo largo del documento, complementando mi punto de vista y lo aprendido en clase con lo que han dicho otros autores sobre esos temas.
Comenzar hablando desde la motivación laboral. Es entendida como la necesidad o el deseo que activa y dirige nuestro comportamiento y subyace a toda tendencia por la supervivencia (Peña, 2018). Es aquella energía que nos invita a realizar cierta actividad con mayor impulso o bien, para dejar de hacerlo. Jan & Triginé (2012) mencionan en su libro “Motivación” que para que esta exista, habrá que analizar varios factores: La situación del clima laboral, el estilo de comunicación y relación de directivos y jefes, así como la comunicación con otros trabajadores y, los enfoques personales.

Concuerdo ampliamente con estos autores, ya que, en mi experiencia laboral, estos son los factores por los que me siento más motivado en mi trabajo, porque la relación que tengo con mis superiores me da la confianza y me invita a poder expresarme y sentirme escuchado en caso de tener algún problema, además, esto afecta el ambiente laboral de una manera positiva ya que crea un grupo de trabajo más cómodo y ameno.
Por otro lado, Kanfer, Chen & Pritchard (2008), nos mencionan que para que exista un cambio en la conducta, tiene que haber un cambio en la motivación. Sobre este argumento no estoy completamente de acuerdo, y tendré que vivir otras experiencias, ya que, para que exista una conducta, tienen que existir emociones y actitudes detrás, y estas se ven moldeadas por las distintas variables mencionadas anteriormente, así que, si tratamos de cambiar la motivación por sí misma, sin hacer modificaciones a las variables, el resultado no será positivo.

Pasando al segundo factor del que compartiré, es importante saber que el estrés es la reacción que puede tener el individuo ante exigencias y presiones laborales que no se ajustan a sus conocimientos y capacidades, que ponen a prueba su capacidad para afrontar la situación (Lacosta, 2019). Es decir, se genera, cuando se nos pide hacer algo que está fuera de nuestras capacidades y nos presionan para hacerlo de la manera adecuada.

Un suceso que me paso relacionado a este concepto, es que en una empresa en la cual omitiré el nombre, la carga laboral era bastante pesada y los tiempos de descanso eran bastante cortos para retomar las actividades de la manera correcta, lo que sucedía con esto, es que la mayoría del personal estaba cansado y desgastado para realizar sus actividades, y como consecuencia, con un estrés que fácilmente se pudo haber evitado.

Tim Ferris, nos menciona que también existe un estrés positivo, a este se le denomina como eustress, y este es el que nos impulsa a hacer las actividades con mayor energía, además de tomar de una manera positiva las tenciones y salir de nuestra zona de confort para crecer, independientemente de nuestro trabajo. (Ferris 2007).

No debemos confundirlo al estrés con una exigencia laboral normal, esto suele suceder debido a la concepción que tenemos de los trabajos, que supuestamente deberían ser relajados y en un ambiente laboral tranquilo, cuando en realidad, los trabajos son demandantes, además, no es necesario definir el estrés como algo malo, ya que es un sentimiento humano natural, y como dice Ferris et. al., este nos impulsa a realizar nuestras actividades de una manera más productiva y eficiente. El problema yace en el manejo de este sentimiento en las organizaciones, ya que no se suele tener control sobre él, y para esto, es necesario tener una buena gestión de recursos y herramientas para poderle obtener el mayor provecho. Un ejemplo de esto sería incentivar a los empleados a cumplir ciertas métricas en su trabajo a cambio de mejores resultados, claramente, los empleados se esforzarán más y generarán estrés, pero, a cambio, tendrán mejores beneficios a su cartera y a su crecimiento personal, esto siempre y cuando el estrés sea tolerable y bien manejado.

Y para finalizar, me gustaría platicar acerca de la inclusión, ya que este es uno de los factores clave para analizar si se tendrá un ambiente sano o no, y este se define así: integrar a las personas con capacidades diferentes o de otras culturas para dejar de lado la discriminación en el ambiente laboral (Peressotti, 2017).

En mi experiencia, solo he tenido un descontento relacionado a la inclusión, y fue que, en una de mis experiencias laborales, tenía dos compañeros que provenían de una comunidad indígena, y para ellos, el proceso para colaborar con la empresa era distinto a los demás, y esto generaba una división entre los trabajadores, ya que, desde un inicio, la administración de la compañía lo hizo verse de tal modo, generando un ambiente laboral distante y exclusivo.

Dicho esto, el hecho de que este tema sea un factor tan importante para saber si el ambiente laboral será bueno o no, es por la importancia que tiene en el trabajo, ya que este es un factor fundamental para la autoestima, ya que un trabajo crea un sentimiento de pertenencia a una comunidad y, además, les permite hacer una contribución productiva a la sociedad.
El trabajo no nada más brinda ingresos económicos, también da la oportunidad desarrollar nuestras habilidades y de aumentar nuestra capacidad en ciertas actividades. Por otro lado, Odracir Barquera (2020), director general de planeación del Consejo Coordinador Empresarial, menciona que el problema de inclusión en los trabajos es que las personas que pertenecen a una minoría llegan al trabajo sintiéndose incomodos o que el resto del equipo de trabajo no se siente cómodo con su presencia. Por lo que mi recomendación a este problema sería implementar capacitación de inclusión en las organizaciones para disminuir esta problemática, y, además, con esto, generar un espacio seguro y amigable para los trabajadores.

Gracias al texto analizado y realizado anteriormente, es que puedo concluir que a mi punto de vista, estos tres factores son los más importantes para determinar si el ambiente laboral será sano o no, ya que la motivación laboral, el estrés y la inclusión laboral, van de la mano en todas las organizaciones, por lo que una empresa inclusiva, tendrá como consecuencia una empresa amigable, y a su vez tendrá un personal motivado para realizar sus actividades y con esto, reducir el estrés laboral o tomar ventaja del eustress, para poder mejorar el rendimiento de nuestras actividades en la compañía. Además, si estos tres factores se implementan correctamente en una organización, una de las consecuencias es que haya más satisfacción laboral y con ello, una mejoría para toda la compañía.

Bibliografía:
Jan & Triginé. (2012). Motivación. Madrid: Ediciones Diaz de Santos.
Kanfer, Chen & Pritchard. (2008). Work Motivation Past, Present, Future. Florida: Organizational Frontier Series.
Humberto Peña Rivas. (2018). Motivación Laboral. Elemento Fundamental en el Éxito Organizacional. La Libertad, Ecuador:
Lacosta David. (2019). Estrés Laboral: Análisis y Prevención. Zaragoza: Prensas de la Universidad de Zaragoza.
Ferris T. (2007). Semana Laboral de 4 horas. Estados Unidos: RBA.
Personas con discapacidad intelectual: metodología y práctica para la inclusión labor / Cynthia Peressotti – 1ª ed. – Córdoba: Brujas, 2017.